Y así después de tanto esperar, un día como cualquier otro DECIDI TRIUNFAR ……
DECIDI no esperar que llegaran las oportunidades, sino salir yo misma a buscarlas.
DECIDI ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución, decidí ver cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis, decidí ver cada noche como un misterio a resolver, decidí ver cada día como una nueva oportunidad de ser feliz.
Aquel día descubrí que mi único rival eran MIS PROPIAS DEBILIDADES y que en cada una de ellas mismas está la única y mejor forma de SUPERARME.
Aquel día dejé de tenerle miedo a fallar, o perder y empecé a tenerle miedo a no intentar ganar.
Descubrí que yo no era la mejor y que quizá nunca lo fui, me dejó de importar quién ganaba o perdía, ahora lo único que me importa es simplemente SABERME MEJOR QUE AYER.
Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino JAMAS DEJAR DE SUBIR.
No llegar a una posición, sino mantenerme. 😉