El emplazamiento es un acto procesal de comunicación que sirve para que el demandado se persone y actúe dentro de un plazo.
Es la forma más habitual de comenzar los procesos civiles y contencioso-administrativos. La falta de comparecencia (dentro de plazo) provocará la rebeldía procesal
También nos encontramos esta figura procesal para comparecer ante el órgano judicial que haya de resolver un recurso y si no lo hiciere el recurrente se declarará desierto